Sra. Editora:
Hemos leído con gran interés el original publicado por Baena-Díez et al1 en Revista Española de Cardiología . Se trata de un estudio de amplia base poblacional, con la finalidad de evaluar la utilidad del índice tobillo-brazo (ITB) para reclasificar a una categoría superior a pacientes de riesgo cardiovascular bajo o intermedio. La principal conclusión del estudio es que el ITB reclasifica una importante proporción de personas hacia la categoría de riesgo alto, en especial las mujeres y con la función REGICOR. Sin cuestionar esta conclusión, creemos que la inclusión de pacientes con diabetes puede distorsionar en cierta medida los hallazgos del estudio. La presencia de pacientes con diabetes (57 de 204 sujetos con ITB < 0,9) puede condicionar la mayor proporción de sujetos que, con un ITB < 0,9, son tratados con estatinas, hipotensores o antiagregantes (además de hipoglucemiantes), y que el porcentaje de sujetos con lipoproteínas de baja densidad < 100mg/dl sea mayor en el grupo con ITB bajo que en el ITB normal, lo que quizá traduce su mayor comorbilidad y seguimiento de guías de práctica clínica2. Puesto que los pacientes con diabetes no han sido excluidos, no podemos conocer qué número de sujetos de riesgo bajo o intermedio tenía este padecimiento, y puede que no sea despreciable, ya que en una serie española la mediana de riesgo SCORE de pacientes diabéticos fue 4,43. Aunque se puede argumentar que la diabetes tipo 2 no sea un equivalente coronario en el noreste español4, no es menos cierto que la diabetes es un predictor, independiente de edad y sexo, de ITB < 0,9, como este mismo estudio confirma5 y que un ITB < 0,9 aparece hasta en un 27% de los sujetos ambulatorios con diabetes tipo 26.
En nuestra opinión, excluyendo a pacientes con diabetes de tipo 2, la medición del ITB en sujetos de bajo riesgo probablemente carezca de interés clínico y no sea una medida eficiente. En nuestra experiencia, sólo un 2% de los sujetos mayores de 50 años presentaron un ITB < 0,9, justificándose por tener bajo riesgo estimado por Framingham Risk Score y SCORE; de los 9 pacientes que tuvieron un ITB < 0,9, en 4 de ellos aparecía claudicación intermitente7; un 33% de los pacientes de esta serie con ITB < 0,9 eran claudicantes5. Compartimos con los autores la incertidumbre de en qué pacientes se debe priorizar la determinación del ITB; para sujetos con riesgo bajo o intermedio quizá la presencia de claudicación o diabetes pueda servir de guía.
Autor para correspondencia: Valdivielso@uma.es