Introducción
Dr. Juan José Gómez Doblas
Presidente del Comité Científico del Congreso
Vicepresidente de la SEC
Comités ejecutivo, organizador y científico
Comité de evaluadores
Listado de sesiones
Índice de autores
Introducción y objetivos: La evidencia acerca de los predictores de recuperación miocárdica y recaída en pacientes con taquimiocardiopatía (TMC) es escasa.
Métodos: Analizamos datos de una cohorte unicéntrica de 200 pacientes ingresados por IC y sospecha inicial de TMC entre 2008 y 2020. Se ha definido la recuperación miocárdica como mejoría de la FEVI a ≥ 50% (recuperación completa) o incremento de FEVI de ≥ 10% hasta ≥ 40% (recuperación parcial). Se han dividido las TMC en puras (si la arritmia se considera la única etiología de la disfunción) e impuras (en caso de diagnosticarse durante el seguimiento otra cardiopatía subyacente que pudiese contribuir a la disfunción). Las recaídas de la disfunción sistólica se definieron como la recurrencia de la disfunción en pacientes con recuperación completa o un descenso de FEVI de ≥ 10%.
Resultados: Tras una mediana de seguimiento de 6,14 años, 168 pacientes (84,0%) presentaron recuperación miocárdica completa. 20 pacientes (10,0%) recuperación parcial y 12 (6,0%) no mostraron una mejoría significativa de la FEVI, por lo que no cumplieron los criterios diagnósticos de TMC. De los 188 pacientes con recuperación miocárdica, 90 (47,9%) se clasificaron como TMC pura y 98 (52,1%) como TMC impura. Los pacientes con TMC pura presentaron mejores tasas de recuperación miocárdica y menor riesgo de recaída, aunque la mortalidad, asistencias a Urgencias y reingresos por IC fueron similares que en el grupo de TMC impura. El sexo masculino, el BRIHH, la menor FC y FEVI, el mayor DTDVI y diámetro de la aurícula izquierda (AI) y las TVNS durante el ingreso se asociaron con menores tasas de recuperación miocárdica completa. Durante el seguimiento, 64 pacientes (34,04%) presentaron una recaída de la disfunción. Se identificaron como predictores de recaída el sexo masculino, la menor edad, la dilatación y disfunción del VD, la menor FEVI, el mayor DTDVI tras la recuperación, las TVNS durante el ingreso, el mayor diámetro de la AI y la recurrencia de la arritmia.
Eventos |
Población total (n = 200) |
Sin recuperación miocárdica (no cumple criterios de TMC) (n = 12) (6,0%) |
TMC pura (n = 90) (45,0%) |
TMC impura (n = 98) (49,0%) |
p |
Recuperación miocárdica (FEVI), n (%) |
|||||
Ausencia de recuperación |
12 (6,00) |
12 (100,00) |
0 (0,00) |
0 (0,00) |
< 0,001 |
Recuperación parcial (40-49%) |
20 (10,00) |
0 (0,00) |
0 (0,00) |
20 (20,41) |
|
Recuperación completa (≥ 50%) |
168 (84,00) |
0 (0,00) |
90 (100,00) |
78 (79,59) |
|
Recuperación miocárdica completa al alta hospitalaria, n (%) |
21 (10,50) |
0 (0,00) |
16 (17,78) |
5 (5,10) |
0,006 |
Tiempo hasta recuperación miocárdica, años (DE) |
1,26 (1,37) |
- |
1,00 (1,35) |
1,49 (1,35) |
0,007 |
Recaída de la disfunción tras la recuperación miocárdica, n (%) |
< 0,001 |
||||
Sin recaída |
124 (65,96) |
- |
73 (81,11) |
51 (52,04) |
|
Recaída menor (FEVI > 40%) |
15 (7,98) |
- |
6 (6,67) |
9 (9,18) |
|
Recaída mayor (FEVI ≤ 40%) |
49 (26,06) |
- |
11 (12,22) |
38 (38,78) |
|
Tiempo hasta recaída de la disfunción, años (DE) |
2,99 (2,22) |
- |
3,22 (2,47) |
2,90 (2,15) |
0,689 |
Asistencias a Urgencias tras la recuperación miocárdica, n (%) |
65 (34,57) |
- |
27 (30,00) |
38 (38,78) |
0,206 |
Hospitalización por IC tras la recuperación miocárdica, n (%) |
40 (21,28) |
- |
15 (16,67) |
25 (25,51) |
0,139 |
Muerte, n (%) |
|||||
Por cualquier causa |
43 (21,5) |
6 (50,00) |
18 (20,00) |
19 (19,39) |
0,046 |
Cardiovascular |
7 (16,28) |
0 (00,00) |
2 (11,11) |
5 (26,32) |
|
No cardiovascular |
26 (60,47) |
2 (33,33) |
11 (61,11) |
13 (68,42) |
0,039 |
Muerte súbita |
6 (13,95) |
3 (50,00) |
2 (11,11) |
1 (5,26) |
|
Causa desconocida |
4 (9,30) |
1 (16,67) |
3 (16,67) |
0 (0,00) |
|
Conclusiones: La incidencia de eventos adversos en pacientes con TMC es alta, independientemente de la presencia de cardiopatía subyacente. Existen parámetros que permiten predecir la recuperación miocárdica e identificar pacientes con alto riesgo de eventos que podrían beneficiarse de un seguimiento estrecho y tratamiento médico óptimo.