ISSN: 0300-8932 Factor de impacto 2023 7,2
Vol. 69. Núm. 6.
Páginas 630-631 (Junio 2016)

Carta al editor
Momento del implante de un marcapasos tras el recambio valvular aórtico percutáneo

Timing of Pacemaker Implantation After Percutaneous Aortic Valve Replacement

Alfredo RenillaJosé M. RubínCésar Morís
Rev Esp Cardiol. 2016;69:28-3610.1016/j.recesp.2015.02.026
José López-Aguilera, José María Segura Saint-Gerons, Francisco Mazuelos Bellido, Javier Suárez de Lezo, Soledad Ojeda Pineda, Manuel Pan Álvarez-Ossorio, Miguel Ángel Romero Moreno, Djordje Pavlovic, Simona Espejo Pérez, José Suárez de Lezo
Rev Esp Cardiol. 2016;69:631-210.1016/j.recesp.2016.03.003
José López-Aguilera, José M. Segura, José Suárez de Lezo

Opciones

Sr. Editor:

Hemos leído con interés el artículo publicado por López-Aguilera et al1 en Revista Española de Cardiología a propósito de los trastornos de la conducción auriculoventricular secundarios al implante de la prótesis aórtica percutánea CoreValve (MCS)1. Tras felicitar a los autores por arrojar más evidencia sobre esta temida complicación, creemos oportuno aportar algunas reflexiones acerca de la evolución temporal de dichos trastornos.

El implante de la prótesis MCS se ha relacionado con la necesidad de implantar un marcapasos hasta en el 35% de los pacientes2. Esta alta tasa se debe a la aparición de un bloqueo auriculoventricular completo (BAVc) durante el implante valvular o posteriormente. La precocidad en el momento del implante del marcapasos, incluso en ocasiones durante el mismo procedimiento, podría deberse a la ausencia de datos sobre la evolución temporal del BAVc secundario al implante valvular, lo que ha podido influir sobre las tasas descritas. Sin embargo, existe una evidencia creciente sobre la temporalidad de dichos trastornos. Varios autores han comunicado tasas de recuperación del ritmo propio en pacientes tratados con la prótesis MCS cercanas al 50%3,4, lo que sugiere que tal vez el mecanismo causal del BAVc es solo temporal, tal como López-Aguilera et al1 han referido al observar la mejoría de los parámetros del estudio electrofisiológico días después del procedimiento.

Por otra parte, existe un grupo de pacientes tratados con la prótesis MCS que precisan un marcapasos durante el seguimiento a largo plazo. Aunque varios autores han establecido los 30 días posteriores al implante para definir los BAVc relacionados con el implante valvular5,6, señalar un límite temporal exacto sobre la causalidad del implante valvular en el desarrollo del BAVc es complejo. Cabe señalar que la tasa de necesidad de un marcapasos en los pacientes tratados con la prótesis MCS durante 1 año de seguimiento es superior a la esperada para un grupo poblacional de edad y características similares7,8. En este sentido, López-Aguilera et al1 hallaron que un 3,8% de los pacientes tratados con la prótesis MCS necesitaron un marcapasos a partir del segundo mes de seguimiento por desarrollar un BAVc, y que un 1,1% lo precisaron por síntomas asociados a alteraciones significativas en el estudio electrofisiológico tardío. Por tanto, parece existir una relación causal entre el implante valvular y la aparición de BAVc durante el seguimiento a largo plazo. Esta teoría puede verse reforzada por el hecho de que algunos autores han demostrado el papel protector del implante de un marcapasos frente a la muerte súbita en los pacientes tratados con prótesis aórticas percutáneas9.

Con el fin de seleccionar adecuadamente aquellos pacientes que precisen un marcapasos definitivo tras el implante valvular, es imprescindible establecer un límite temporal previo a la decisión del implante del marcapasos, ya que existe la posibilidad de que el BAVc sea reversible, y en segundo lugar hay que definir los factores predictivos relacionados con la aparición de un BAVc tardío. Así, los pacientes que presenten factores predictivos de BAVc tras un implante percutáneo de válvula aórtica claramente reconocidos en la literatura médica, como son el bloqueo de rama derecha y la profundidad del implante valvular, tendrán que ser seguidos estrechamente.

CONFLICTO DE INTERESES

C. Morís es proctor de la válvula CoreValve y miembro del Advisory Board Latinoamericano de Medtronic.

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