El constante y a veces vertiginoso avance en el conocimiento de las enfermedades cardiovasculares hace difícil la actualización de conocimientos y, más todavía, su incorporación a la práctica clínica de una manera coherente e integrada. Desde esta óptica, siempre es de agradecer encontrar textos concisos que, incorporando informaciones recientes, intentan establecer los puntos aceptados mayoritariamente, diferenciándolos con nitidez de aquellos que se encuentran en discusión o en fase de investigación.
El libro que nos ocupa se centra en el tratamiento terapéutico de las afecciones cardiovasculares que encontramos con mayor asiduidad en la práctica clínica diaria. Los 13 capítulos se distribuyen del modo siguiente: tres tratan de los síndromes coronarios agudos (angina inestable, síndrome con elevación del ST e intervencionismo coronario en el infarto agudo de miocardio), otros tres estudian las arritmias más comunes (fibrilación auricular, taquicardia supraventricular y taquicardia ventricular), y dos se centran en temas directamente relacionados con la cardiología invasiva, como son la reestenosis coronaria y el tratamiento intervencionista de las lesiones coronarias problemáticas. Por último, merecen un capítulo la insuficiencia cardíaca, la hipertensión arterial, la endocarditis bacteriana y la enfermedad arterial periférica.
Los editores amplían su ámbito asiático y cuentan con colaboraciones de primer orden internacional. Así, los Dres A.J. Solomon y B. Gersh desarrollan el capítulo dedicado a la angina inestable, el Dr. N. Kaplan escribe sobre el tratamiento actual de la hipertensión arterial, y el grupo del Instituto de Cardiología de Montreal se encarga de exponer el tema de la reestenosis coronaria.
La estructura de los capítulos es bastante uniforme. Se inicia con una presentación global del problema y con un repaso del abordaje convencional de la enfermedad correspondiente. Posteriormente se plantean aspectos difíciles, no resueltos o conflictivos, introduciendo el papel de las nuevas opciones terapéuticas en estos campos. Los capítulos terminan con un resumen eminentemente práctico. El estilo es claro y conciso, fácilmente comprensible, con entre 3 y 6 tablas o figuras por capítulo y unas 25 a 50 citas bibliográficas, las más actuales de las cuales corresponden al primer semestre de 1999.
Por todo lo expuesto, existen argumentos suficientes para recomendar esta obra a cardiólogos clínicos y residentes de la especialidad, tal como hace el Prof. E. Braunwald en la presentación del libro.