En un número reciente de Revista Española de Cardiología, Flores-Ríos et al1 presentaron de forma resumida el caso de una mujer de 66 años con una calcificación ventricular izquierda masiva, y llegan a la conclusión de que la cardiopatía subyacente era una fibrosis endomiocárdica. Sin embargo, nosotros consideramos que esta conclusión se puede poner en duda.
La fibrosis endomiocárdica es una miocardiopatía restrictiva de etiología desconocida que se produce casi exclusivamente en regiones tropicales y subtropicales, en especial en algunos países de África, India y Brasil. La enfermedad se caracteriza por un engrosamiento fibroso irregular del endocardio en el vértice y el infundíbulo de entrada de uno o ambos ventrículos. La trombosis sobreañadida y la calcificación endomiocárdica son frecuentes en los casos avanzados. La obliteración parcial o total de la región apical de las cavidades ventriculares conduce a una disfunción diastólica2. La ecocardiografía y, más recientemente, la resonancia magnética pueden mostrar las lesiones típicas y son las técnicas más útiles para confirmar el diagnóstico3. La biopsia endomiocárdica es útil tan solo en la presunta fase aguda-subaguda de la enfermedad, en la que podría haber también una inflamación endomiocárdica con contenido de eosinófilos desgranulados y trombosis4.
En el caso descrito, la paciente presentaba una disfunción leve sistólica, no diastólica, y la calcificación masiva estaba situada principalmente en el miocardio. No se registró obliteración apical ventricular en la ecocardiografía. La biopsia endomiocárdica mostró signos inespecíficos, es decir, hipertrofia miocardiocitaria y bandas de fibrosis endomiocárdica. Por lo tanto, el diagnóstico de fibrosis endomiocárdica carece de consistencia.
La calcificación tisular puede ser metastásica o distrófica. La calcificación metastásica se produce en el tejido normal a causa de la hipercalcemia; no disponemos de datos relativos a la concentración sérica de calcio en la paciente presentada. La calcificación distrófica del miocardio es secundaria a la necrosis del tejido y se ha descrito en varios trastornos, como el infarto de miocardio, la miocarditis, la calcificación anular mitral idiopática y la fibrosis endomiocárdica5.
En conclusión, aunque la fibrosis endomiocárdica podría ser una posibilidad, a la vista de los datos presentados, consideramos que no se dan unos criterios definitivos para este diagnóstico específico y que la calcificación ventricular izquierda masiva de la paciente debe considerarse de etiología desconocida.