Introducción
Dr. Luis Rodríguez Padial
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Índice de autores
Introducción y objetivos: Cada vez más pacientes con disfunción ventricular (DSVI) e insuficiencia cardiaca (IC) se derivan a las unidades de rehabilitación cardiaca (RC). Las características especiales de estos pacientes suponen un reto obligándonos a adaptar el entrenamiento y los objetivos.
Métodos: Recibimos 206 pacientes (89,9% varones) con DSVI grave (FEVI ≤ 35%, 17,5% del total de pacientes). El 92% tenía enfermedad coronaria. Realizamos un programa integral combinando charlas educativas y sesiones de ejercicio supervisado durante 6-8 semanas con una consulta médica individualizada. Analizamos el perfil de riesgo de los pacientes, así como los resultados obtenidos en el programa.
Resultados: Existía una alta carga de factores de riesgo: el 52,9% tenía HTA, 28,6% diabetes, 53,4% dislipemia, 55,6% tabaquismo y 25,5% eran exfumadores, 25,9% obesos y 55,1% sedentarios. Además tenían una alta prevalencia de comorbilidades, con fibrilación auricular el 7%, valvulopatías moderadas o graves 15%, EPOC 6%, SAHS 5%, ictus 2,4%, arteriopatía periférica 8%, artrosis 15%, e insuficiencia renal crónica (Cr ≥ 1,3 mg/dl) 23%. El tratamiento médico se optimizó recibiendo beta bloqueantes el 94% de los pacientes, IECA/ARA II 89%, antagonistas de aldosterona 78% e ivabradina 15%. El 28% recibían diuréticos y 92% AAS y estatinas. Se produjo una mejoría significativa en el perfil metabólico (tabla). El 15% de los pacientes obtuvo una pérdida de peso > 5% del basal. El abandono del tabaco se consiguió en el 78% a los 3 meses. La capacidad funcional mejoró desde 6,1 METs de media al inicio del programa hasta 9,7 METs al final. Solo el 4,5% continuaban con mala clase funcional (≤ 5 METs) al final del programa, frente al 43,2% en la ergometría basal. En cuanto a la función ventricular, el 81% tuvo una recuperación > 10%: la fracción de eyección media pasó del 29,5% hasta el 42% al final del programa; hay que tener en cuenta que en un alto porcentaje se había llevado a cabo revascularización coronaria tras un infarto. En el 22% de los pacientes se implantó un DAI, siendo la tasa de descargas inapropiadas o descargas durante el ejercicio del 0%. La tasa de abandonos fue del 14%.
Parámetros metabólicos y antropométricos (valores medios) |
Basal |
Final del programa |
p (t de Student) |
LDL (% < 70 mg/dl) |
104 ± 37 (20,3%) |
75 +-28 (44,3%) |
< 0,001 |
HDL |
36 ± 10 |
37 ± 10 |
0,537 |
TG |
143 ± 84 |
112 ± 52 |
< 0,001 |
HbA1c |
6,3 ± 1,7 |
6 ± 1 |
0,047 |
IMC |
27,9 ± 4,9 |
27,3 ± 4,3 |
< 0,001 |
Perímetro abdominal |
100,3 ± 12 |
98,4 ± 11 |
< 0,001 |
METs |
6,1 |
9,7 |
< 0,001 |
FEVI |
29,5 |
42 |
< 0,001 |
Conclusiones: Los pacientes con DSVI e IC se benefician de un programa estructurado de RC, con mejoría tanto en el perfil de riesgo metabólico a través de los cambios en el estilo de vida como en la capacidad funcional mediante el ejercicio físico adaptado.