Introducción
Dr. Luis Rodríguez Padial
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Índice de autores
Introducción y objetivos: El síndrome aórtico agudo (SAA) se caracteriza por una elevada morbimortalidad. Dentro del SAA, el hematoma intramural aórtico (HIA) es el que muestra una mayor variabilidad en su historia natural. Nuestro objetivo fue evaluar el pronóstico y la evolución a medio plazo de los pacientes con HIA.
Métodos: Analizamos 40 pacientes con HIA recogidos de forma consecutiva desde 2000 a 2015 en un hospital terciario de referencia. En todos los pacientes el diagnóstico se realizó en base a los hallazgos de las pruebas de imagen: tomografía computarizada (TC), ecocardiograma transesofágico o resonancia magnética. Se definió el HIA como la presencia de un engrosamiento de la pared aórtica circular o semilunar ≥ 5 mm sin flujo en su interior, acompañando a síntomas o signos típicos de SAA.
Resultados: 23 pacientes (57,5%) presentaban HIA tipo A y 17 (42,5%) HIA tipo B. La mediana de seguimiento fue de 1,8 años, RIC (0,5-5,7) años. La edad media de la población fue 73,5 ± 10,1 años y un 62,5% eran varones, sin diferencias entre tipo A y B. El 70% (16) de los pacientes con HIA tipo A se trataron de forma quirúrgica. De los HIA tipo B, 13 (76,4%) se trataron de forma conservadora. La mortalidad intrahospitalaria fue del 27,5% y en un 88,9% de los pacientes persistía HIA en el TC al alta. La mortalidad intrahospitalaria fue superior en los HIA tipo A (29,1 frente a 11,8%, p = 0,055). Los datos relativos a la evolución a medio plazo se muestran en la tabla. En el seguimiento fallecieron 8 pacientes (20%), sin diferencias entre los tipos A y B (tabla). Sólo en 1 paciente la muerte tuvo relación con el SAA. El seguimiento radiológico mostró una amplia variabilidad en la evolución del HIA: 7 (17,5%) se resolvieron, 11 (27,5%) desarrollaron aneurismas, 14 (35%) mostraban imagen de HIA y 4 (10%) de disección. Durante la evolución, el desarrollo de aneurisma, la persistencia de HIA y la disección fue más frecuente en los HIA tipo B (tabla).
Evolución a medio plazo de los pacientes con HIA |
|||
Variable |
Tipo A |
Tipo B |
p |
HTA no controlada |
6 (26,1%) |
8 (47,1%) |
0,169 |
Dolor torácico |
3 (13%) |
6 (35,3%) |
0,096 |
Insuficiencia cardiaca |
3 (13%) |
2 (11,8%) |
> 0,999 |
ACV |
1 (4,3%) |
1 (5,9%) |
> 0,999 |
Insuficiencia renal |
3 (13%) |
6 (35,3%) |
0,096 |
FA |
2 (8,7%) |
0 (0%) |
0,499 |
Trastorno de la conducción |
2 (8,7%) |
6 (35,3%) |
0,053 |
Mortalidad |
4 (17,4%) |
4 (23,5%) |
0,702 |
Mortalidad relacionada con el SAA |
1 (4,3%) |
0 (0%) |
> 0,999 |
Mortalidad por causa cardiovascular |
2 (8,7%) |
0 (0%) |
0,499 |
Evolución radiológica en el seguimiento a medio plazo |
|||
Resolución |
3 (13%) |
4 (23,5%) |
0,432 |
Aneurisma |
2 (8,7%) |
9 (52,9%) |
0,002 |
Disección aórtica |
1 (4,3%) |
3 (17,6%) |
0,294 |
Persistencia del HIA |
5 (21,7%) |
9 (52,9%) |
0,041 |
Úlcera aórtica |
2 (8,7%) |
2 (11,8%) |
0,999 |
Trombo mural |
0 (0%) |
2 (11,8%) |
0,174 |
ACV: accidente cerebrovascular; FA: fibrilación auricular; HIA: hematoma intramural aórtico; SAA: síndrome aórtico agudo. |
Conclusiones: La mortalidad de los pacientes con HIA continúa siendo muy elevada. No obstante, una vez pasado el evento agudo, la mortalidad asociada al HIA es muy baja. En el seguimiento a medio plazo, la evolución radiológica del HIA es muy variable.