Sra. Editora:
En el artículo de Revista Española de Cardiología 1, el autor plantea la disyuntiva sobre la presencia de micropartículas (MP), preferentemente ultrafinas, en la incidencia de síndrome coronario agudo (SCA). Sin embargo y con el fin de saber exactamente el supuesto papel de dichas partículas en la génesis del SCA, así como cuantificar el riesgo añadido y su efecto en la estratificación de pacientes con SCA, los autores no indican los marcadores disponibles en la actualidad, que se basan en demostrar la disfunción endotelial que se produce en esta entidad. De esta forma, en estudios tanto experimentales como clínicos, se ha señalado que la disfunción endotelial se puede considerar como un biomarcador, pues tal disfunción se ha analizado en diferentes trabajos como un predictor independiente de los eventos adversos ocurridos en pacientes diagnosticados de SCA2, 3. En este sentido, se han cuantificado los valores plasmáticos de CD31+/anexina V+ como un marcador de disfunción endotelial4, 5. Ha sido valorado recientemente este mismo marcador6, cuyo incremento plasmático se ha considerado un factor de riesgo cardiovascular con empeoramiento de la función endotelial, considerado factor independiente de riesgo de eventos cardiovasculares adversos en pacientes diagnosticados de SCA estabilizados. En este mismo sentido, Nozaki et al7 estudiaron las concentraciones del marcador de disfunción endotelial CD144+ como parte de una estrategia de diferentes biomarcadores, tales como el péptido natriurético B, la proteína C reactiva de alta sensibilidad, y la cantidad de micropartículas circulantes, cuya determinación se realiza cuantificando la disfunción endotelial, en una población de alto riesgo de padecer SCA. Observaron que valores elevados de MP son un predictor independiente de muerte cardiovascular y SCA, lo que además proporciona una mejor estratificación de riesgo cardiovascular y permite que los pacientes se beneficien de los tratamientos más agresivos que pueden mejorar su pronóstico. La disfunción endotelial generada por las MP circulantes es un factor de riesgo cardiovascular que se puede añadir a los factores de riesgo considerados «clásicos» y se puede medir mediante diferentes marcadores biológicos, lo que elimina la duda sobre la importancia de dichas MP en la génesis del SCA.