Hemos leído con gran interés la carta al Editor de Levent Cerit respecto al artículo «Revascularización multivaso o solo de la lesión culpable en pacientes con infarto de miocardio con elevación del segmento ST: análisis de un registro a 8 años»1. Tal como señalan los autores, hay varias razones que podrían explicar el peor pronóstico de los pacientes con infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST y enfermedad coronaria multivaso, en especial cuando tienen una puntuación SYNTAX elevada. Es probable que la carga de la ateroesclerosis coronaria anatómica, sea obstructiva o no, se asocie a más lesiones ateroescleróticas subclínicas que puedan sufrir una rotura y causar una evolución clínica adversa2,3. En los pacientes con infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST y enfermedad multivaso a los que se practica una intervención coronaria percutánea primaria de la arteria culpable, la cuantificación de la enfermedad arterial coronaria residual mediante la puntuación SYNTAX residual puede ser útil para identificar a los pacientes que presentan un aumento del riesgo de eventos adversos4. De hecho, en nuestra población, la puntuación SYNTAX residual fue un factor independiente predictivo de eventos cardiovasculares agudos mayores y mortalidad por cualquier causa durante el seguimiento; estos datos se han presentado para publicación.
Actualmente no hay consenso respecto al tratamiento de las lesiones no culpables tras una intervención coronaria percutánea primaria. Aunque posiblemente sea utópico, sería deseable definir una puntuación que incluya la complejidad anatómica de la enfermedad residual e identifique a los pacientes que claramente obtendrían beneficio de la revascularización multivaso. Todavía quedan muchas preguntas que es preciso aclarar: teniendo en cuenta las especificidades del paciente, el operador y la lesión, ¿es posible una estandarización? ¿Se debe tratar las lesiones isquémicas, las placas vulnerables o ambas? ¿Hay que tratar de manera más agresiva a los pacientes vulnerables (p. ej., los que presentan disfunción ventricular izquierda, enfermedad renal o diabetes)?
Mientras no se disponga de una estrategia basada en la evidencia, con los pacientes con infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST y enfermedad multivaso compleja se debe seguir el juicio clínico sustentado en el examen realizado por el equipo multidisciplinario.