Introducción: La vitamina D y el factor de crecimiento de fibroblastos-23 (FGF-23) están implicados en la enfermedad renal y se han relacionado con el desarrollo de Cardiopatía Isquémica (CI). Hemos investigado si los niveles plasmáticos de calcidiol (un metabolito de la vitamina D) y de FGF-23 están relacionados con la incidencia de eventos adversos en pacientes con CI.
Métodos: Seguimos a 704 pacientes con CI hasta 4,6 años. Evaluamos los niveles plasmáticos de calcidiol, FGF-23, fosfato y parathormona basalmente. El objetivo era el desarrollo de un evento vascular isquémico agudo (síndrome coronario agudo con/sin elevación de ST, accidente cerebrovascular o accidente isquémico transitorio) insuficiencia cardiaca o muerte.
Resultados: La edad fue 61,4 ± 12,3, el 75,3% eran hombres y el seguimiento medio fue 2,15 ± 0,99 años. Setenta y siete pacientes desarrollaron el objetivo. Junto a la edad, existencia de hipertensión arterial y tratamiento con nitratos o inhibidores de la bomba de protones, los niveles de calcidiol y FGF-23 eran predictores independientes del desarrollo del objetivo [Riesgo Relativo: 0,677, intervalo de confianza del 95% (IC) 0,478-0,958, p = 0,028 y 1,120 (IC 1,029-1,220, p = 0,009), respectivamente] (modelo de riesgo proporcional de Cox). El filtrado glomerular renal no tenía valor predictivo independiente. Los niveles de calcidiol bajo y altos de FGF-23 se asociaron a menor supervivencia libre de eventos (p = 0,004 en ambos casos, test de log-rank). El poder predictivo de los niveles de calcidiol era más fuerte en los pacientes que presentaban niveles de FGF-23 por encima de la mediana (69,9 RU/ml) (p = 0,002) y desaparecía en los que estaban por debajo de este valor (p = 0,763). Del mismo modo, los niveles plasmáticos de FGF-23 mostraban un alto poder predictivo en pacientes con niveles de calcidiol por debajo de la mediana (19,9 ng/dl) (p = 0,003), pero no en los que estaban por encima de este valor (p = 0,754). No hubo correlación entre los niveles de calcidiol y FGF-23 (r = -0,077, p = 0,058). La coexistencia de deficiencia grave de calcidiol (0,00-10,00 ng/ml) y de niveles de FGF-23 por encima de la mediana confería un riesgo de eventos más alto que cualquier otra variable [3,213 (IC 1,700-6,070), p < 0,001)].
Conclusiones: La coexistencia de niveles plasmáticos bajos de calcidiol y elevados de FGF-23 se asocia de forma independiente con un pronóstico adverso en pacientes con CI.