Hemos leído con enorme interés y agradecimiento el editorial publicado en Revista Española de Cardiología sobre embarazo y enfermedad cardiaca1. Para todos los cardiólogos, pero fundamentalmente para los clínicos, este trabajo supone, por un lado, una puesta al día sobre patología cardiovascular durante la gestación y antes de la misma y, por otro, nos da a conocer el Registry of Pregnancy and Cardiac Disease (ROPAC), del que sin duda se derivarán nuevas evidencias y mejoras en nuestra práctica diaria. Nos gustaría resaltar varios aspectos que parecen clave: en primer lugar, el asesoramiento y la planificación que precisan las pacientes con cardiopatía, que no reciben seguimiento en consultas específicas y requieren una atención especial antes y en el curso del embarazo, más allá de los controles y seguimientos habituales. Por ejemplo, pacientes con válvula bicúspide y aneurisma de aorta ascendente seguidas en consultas generales o aquellas que refieran antecedente de muerte súbita familiar no filiada2.
De ello se deriva un segundo aspecto que tener en cuenta, la necesidad de crear consultas específicas y equipos multidisciplinarios que permitan un seguimiento estrecho y faciliten la toma de decisiones con anticipación y consensuada (el tipo de parto, por ejemplo) para evitar situaciones de riesgo o decisiones improvisadas3. Los equipos multidisciplinarios sobre una enfermedad concreta permiten aunar criterios y adquirir experiencia y conocimientos que sin duda contribuyen a la mejor atención de los pacientes. Además, es necesario tener en mente todas las situaciones en que son necesarios el consejo genético, el cribado familiar y la planificación del embarazo.
Afortunadamente se dispone de guías de práctica clínica que, aun con las limitaciones que describen los autores, son hasta la fecha la única fuente que debemos tener presente como referencia4. Finalmente, iniciativas como el ROPAC son fundamentales para mejorar nuestra práctica diaria; sin duda, los registros aportan enormes conocimientos y son de gran ayuda en nuestra labor asistencial. Estas iniciativas y otras similares son bienvenidas y esperamos que de este y otros registros en marcha se derive una atención de más calidad para nuestras pacientes5.