Introducción
Dr. Juan José Gómez Doblas
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Listado de sesiones
Índice de autores
Introducción y objetivos: Las guías europeas de IC de 2021 recomiendan la implementación de la cuádruple terapia en pacientes con IC y FEVI ≤ 40%. En la práctica clínica existen limitaciones que impiden su rápida implementación, y existe poca evidencia sobre el beneficio que supone el inicio de una cuádruple terapia frente a una triple terapia.
Métodos: Se realizó un registro prospectivo multicéntrico (32 centros a nivel nacional), incluyendo a todos los pacientes con nuevo diagnóstico de IC con FEVI ≤ 40% en la práctica clínica. Se recogieron las características de los pacientes de manera basal, al mes y a los 3 meses. Se analizaron los cambios en diferentes parámetros en función de la instauración de una triple o cuádruple terapia de manera inicial, conforme a lo recomendado en las guías europeas. Se consideró tratamiento basal al que llevaba el paciente al alta de la hospitalización o en primera consulta ambulatoria, con un plazo máximo de 1 mes tras el diagnóstico ecocardiográfico.
Resultados: Se incluyeron 534 pacientes, de los cuales estaban disponibles de manera basal los datos de 419. La edad media era de 65,3 ± 13,5 años, siendo el 71,7% varones. El 82,9% fueron diagnosticados durante un ingreso hospitalario. La FEVI media fue de 28,5 ± 7,5%. El tratamiento inicial instaurado fue: inhibidores del SRAA en 391 pacientes (93,3%), bloqueadores beta en 395 (94,2%), antagonistas del receptor mineralocorticoides en 318 (75,9%), iSGLT2 en 311 (74,2%) y diuréticos de asa en 307 (73,3%). Se inició cuádruple terapia en 240 pacientes (57,3%) y triple en 115 (27,4%). A los 3 meses, 103 pacientes (70,5%) llevaban cuádruple terapia y 32 (21,9%) triple terapia. En la tabla se muestran los resultados en función del inicio con una cuádruple o triple terapia. El comportamiento del NTproBNP en función del esquema de tratamiento se muestra en la figura.
Comparación de diferentes parámetros en función del esquema inicial de tratamiento |
||||||
Triple terapia |
Cuádruple terapia |
|||||
Basal |
3 meses |
Valor p |
Basal |
3 meses |
Valor p |
|
FEVI (%) |
26,4 (1,7) |
37,6 (2,1) |
0,0001 |
29,7 (1,2) |
42,8 (1,6) |
0,0001 |
TAPSE (mm) |
17,8 (0,7) |
20,0 (1,0) |
0,08 |
17,6 (0,8) |
20,1 (0,7) |
0,01 |
NTproBNP (pg/ml) |
6966,0 (1660,4) |
2289,0 (591,6) |
0,007 |
3619,4 (431,3) |
1629,6 (266,8) |
0,0001 |
Cr (mg/dl) |
1,09 (0,1) |
1,1 (0,1) |
0,92 |
1,07 (0,1) |
1,07 (0,1) |
0,89 |
TFG (ml/min) |
72,1 (4,8) |
73,3 (5,1) |
0,61 |
68,6 (2,1) |
70,7 (2,2) |
0,21 |
K (mEq/l) |
4,5 (0,1) |
1,7 (0,1) |
0,007 |
4,3 (0,1) |
4,7 (0,1) |
0,00001 |
Clase NYHA I-n (%) |
12 (10,9) |
11 (31,4) |
0,47 |
27 (11,8) |
34 (40,5) |
0,024 |
Clase NYHA II-n (%) |
69 (62,7) |
23 (65,7) |
138 (60,3) |
47 (56,0) |
||
NYHA III-n (%) |
21 (19,1) |
1 (2,9) |
46 (20,1) |
3 (3,6) |
||
NYHA IV-n (%) |
8 (7,3) |
0 (0) |
18 (7,9) |
0 (0) |
||
PA sistólica (mmHg) |
118,5 (3,1) |
116,3 (2,9) |
0,52 |
117,4 (1,9) |
117,2 (2,2) |
0,93 |
Frecuencia cardiaca (lpm) |
71,8 (2,6) |
64,6 (1,7) |
0,003 |
74,6 (1,9) |
69,3 (1,6) |
0,006 |
Visitas urgencias o ingresos-n (%)* |
5 (27,7) |
7 (38,8) |
||||
Implante TRC-n (%)** |
3 (33,3) |
3 (33,3) |
||||
Implante DAI-n (%)** |
5 (41,7) |
4 (33,3) |
||||
Revascularización coronaria-n (%)*** |
5 (27,8) |
10 (55,6) |
||||
Intervencionismo valvular-n (%)**** |
0 (0) |
2 (66,7) |
||||
Test t Student para variables cuantitativas apareadas Test exacto de Fisher para comparación de proporciones *18 visitas a urgencias o ingresos hospitalarios **9 implantes de TRC y 12 implantes de DAI ***18 revascularizaciones coronarias. |
Evolución del NTproBNP en función del esquema de tratamiento de inicio.
Conclusiones: Nuestros resultados sugieren que la instauración de la cuádruple terapia durante el primer mes tras el diagnóstico de la IC podría posibilitar una mayor recuperación de la fracción de eyección y de la clase funcional, con un perfil similar de seguridad. Estos hallazgos pueden explicarse por el efecto aditivo y beneficio precoz de algunos fármacos, aunque es necesario estudiar si este beneficio también se produce cuando se alcanza la cuádruple terapia de manera progresiva durante el seguimiento o si el beneficio depende del esquema concreto de fármacos empleados.