Introducción
Dr. Arturo Evangelista Masip
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Índice de autores
Introducción y objetivos: En estudios previos se ha objetivado que la presencia de bloqueo de rama derecha de nueva aparición (BRDN) en pacientes con infarto agudo de miocardio (IAM), se asocia a un incremento en las complicaciones y mayor mortalidad. Nos propusimos valorar el impacto pronóstico de la presencia de BRDN en nuestra serie.
Métodos: Estudio observacional y prospectivo de 7.652 pacientes con IAM ingresados de forma consecutiva en 2 hospitales de la región. Se realizaron modelos de regresión logística binaria y de Cox para mortalidad a corto y largo plazo (mediana 7,2 años).
Resultados: Del total de 7.652 pacientes con IAM, se recogieron 319 con BRDN (4,16%), de los cuales 130 (1,6%) fueron nuevos permanentes, y 189 (2,4%) nuevos transitorios. Los pacientes con BRDN se caracterizaron por una mayor edad media (67,8 frente a 66,1% p = 0,03), un perfil clínico similar y menores tasas de cardiopatía isquémica previa (40,4 frente a 50,1%, p = 0,001). Los pacientes con BRDN ingresaron con menor retraso (165 frente a 226 min, p < 0,001), y más frecuencia presentaron clase Killip > I (42,6 frente a 23,6%, p < 0,001) y clase Killip IV (13,2 frente a 3,2%, p < 0,001). Los pacientes con BRDN presentaron mayor elevación del segmento ST (sumatorio total de elevación de segmento ST 13,2 frente a 7,1 mm, p < 0,001), mayor elevación de CKMB (289 frente a 143 ng/dl, p < 0,001), peor función ventricular (40 frente a 48%, p < 0,001), tasas más altas de IAMCEST (94 frente a 74,4%, p < 0,001), localización anterior del IAM (75,5 frente a 31,3%, p < 0,001) y recibieron mayores tasas de reperfusión (80,6 frente a 55,7%, p < 0,001) y revascularización total (88,7 frente a 77,8%, p < 0,001). Durante el ingreso los pacientes con BRDN presentaron en su evolución mayores tasas de clase Killip > I (53,6 frente a 29,1%, p < 0,001) y Killip IV (26 frente a 8%, p < 0,001), fibrilación auricular (23,2 frente a 14,1%, p < 0,001), fibrilación ventricular (19,1 frente a 5,6%, p < 0,001) y taquicardia ventricular (9,4 frente a 3%, p < 0,001). Después de controlar por las características demográficas y clínicas, el BRDN resultó predictor de mortalidad hospitalaria; HR: 1,53 (IC95% 2,14-2,32) y a largo plazo; HR: 1,23 (IC95% 1,02-1,47).
Conclusiones: En nuestro estudio, la presencia de BRDN se asoció a peor situación clínica al ingreso y más complicaciones. El BRDN resultó ser predictor independiente de mortalidad a corto y largo plazo.