Introducción
Dra. Lina Badimón Maestro
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Índice de autores
Objetivos: Los signos de infección persistente (IP) traducen una situación de sepsis no controlada y la antesala del shock séptico en la endocarditis infecciosa (EI). Nuestro objetivo consiste en identificar los factores de riesgo para el desarrollo de IP que podrían beneficiarse de un tratamiento precoz.
Métodos: Analizamos 657 episodios de EI izquierda recogidos de forma prospectiva y consecutiva desde 1996 hasta 2013 en 3 hospitales de referencia. Se clasificaron en 2 grupos: Grupo I (n = 174) episodios que desarrollaron IP; Grupo II (n = 483) episodios que no lo hicieron. Se definió la IP como bacteriemia o fiebre tras 7 días de tratamiento antibiótico apropiado y tras descartar otros posibles focos de infección.
Resultados: La edad y el sexo fue similar entre los grupos. Tampoco hubo diferencias en la presencia de comorbilidades y la puerta de entrada. Al ingreso, la presencia de fiebre (p = 0,044), shock séptico (13,2% vs 4,6%, p < 0,001) y embolias al SNC (p = 0,003) fue más frecuentes en el Grupo I. La presencia de complicaciones perianulares fue mayor en el Grupo I (40,8% vs 27,7%, p = 0,002). La proporción de pacientes con hemocultivos positivos al ingreso (p < 0,001) y a las 48h (p < 0,001) fue superior en el Grupo I. El análisis microbiológico mostró una mayor prevalencia de S.aureus (24,1% vs 9,5%, p < 0,001) y bacilos Gram- (BGN) (5,7% vs 2,3%, p = 0,025) en el Grupo I, y de S. bovis (p = 0,044) en el Grupo II. Los pacientes con IP tuvieron una evolución más tórpida con mayor frecuencia de fiebre (p < 0,001), insuficiencia renal (p = 0,024), shock séptico (p < 0,001), embolias sistémicas (p = 0,004) y al SNC (p = 0,002). La proporción de pacientes operados fue similar (73,6% vs 78,7%, p = 0,167), sin embargo la mortalidad fue muy superior (50% vs 26,3%, p < 0,001) en el Grupo I. La cirugía se asoció a una reducción significativa de la mortalidad de los pacientes con IP (39,7% vs 79,1%, p < 0,001). Se realizó un análisis multivariado para identificar los factores de riesgo independiente para el desarrollo de IP (tabla).
Análisis multivariado de los factores de riesgo asociados a la aparición de infección persistente |
||
Odds ratio (IC95%) |
p |
|
Fiebre al ingreso |
1,05 (0,67-1,65) |
0,833 |
Shock séptico al ingreso |
2,75 (1,40-5,40) |
0,003 |
Hemocultivos positivos al ingreso |
1,53 (1,07-2,19) |
0,014 |
Hemocultivos positivos a las 48h |
1,57 (1,22-2,02) |
0,001 |
S. aureus |
2,43 (1,46-4,05) |
0,001 |
Bacilos Gram negativos |
2,59 (1,02-6,58) |
0,041 |
Complicaciones perianulares |
1,66 (1,12-2,46) |
0,014 |
Vegetación presente |
1,01 (0,56-1,82) |
0,976 |
Edad |
1,01 (0,99-1,02) |
0,256 |
Insuficiencia valvular moderada-grave |
1,05 (0,68-1,62) |
0,821 |
Conclusiones: La IP se asocia con una mayor incidencia de complicaciones y mortalidad en la EI. La cirugía reduce la mortalidad de los pacientes con IP. S. aureus, los BGN, las complicaciones perianulares, y la persistencia de hemocultivos positivos constituyen factores de riesgo de IP en los que la cirugía precoz podría prevenir el desarrollo de IP y reducir la mortalidad.