Introducción: Con frecuencia no se tiene en cuenta el condicionante cultural del individuo para afrontar episodios traumáticos o de dolor físico.
Objetivos: Averiguar, en base a la cultura de procedencia y el sexo, quienes son los sujetos más sensibles emocionalmente ante un proceso de cateterismo cardiaco.
Material y métodos: Estudio longitudinal retrospectivo. Población: pacientes consecutivos desde el 15 de junio de 2000 hasta el 20 de abril de 2011 en el laboratorio de hemodinámica. Se selecciona a los sujetos con bradicardia o hipotensión que precisen administración de atropina, solución salina o ambas durante los 15’ iniciales al procedimiento. Se excluyen segundos procedimientos o subsiguientes y episodios vagales pasados los 15’ iniciales entendiendo que no corresponden a una etiología emocional. Se diferencian dos grandes grupos culturales: occidentales y no occidentales; se entienden como culturas y etnias no occidentales las del Magreb, África subsahariana e Indoasiática; como occidentales los europeos y americanos de ambos hemisferios. Manejo de datos: SPSS 16.0.
Resultados: 13.348 pacientes (9.476 varones [70,99%] y 3.872 mujeres [29%]), con criterios de inclusión 725 (5,431%), 588 varones [81,1%] y 137 mujeres [13,24%]. Un 6,20% de hombres respecto a un 3,53% de mujeres presentan episodio vasovagal. Se hallan 241 sujetos de cultura no occidental (211 varones [87,5%] y 30 mujeres [12,5%]), con criterios de inclusión 17, todos varones (8,05%). En 8 de ellos con barrera idiomática total o muy importante. En ambos grupos culturales fue dominante la reacción vagal en hombres de mediana-alta edad y en mujeres directamente proporcional a la senectud.
Conclusiones: Los varones muestran mayor número de reacciones vagales y ansiedad que las mujeres ante procedimientos invasivos cardiacos. Ambos sexos a mayor edad peor tolerancia. Los varones no occidentales superan el porcentaje de reacción vagal siendo el factor de barrera idiomática un factor relevante.