Introducción
Dr. Luis Rodríguez Padial
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Índice de autores
Introducción y objetivos: Las especialidades deportivas de alto componente dinámico se caracterizan por el desarrollo del llamado “corazón del deportista”, en relación directa con el entrenamiento. Se pretende evaluar los parámetros electro y ecocardiográficos que permiten identificar las adaptaciones fisiológicas cardiovasculares del “corazón del deportista”.
Métodos: Se realizó un estudio retrospectivo en deportistas de alto rendimiento que se habían sometido a reconocimiento cardiológico entre los años 2015 y 2016, analizando los principales hallazgos electro y ecocardiográficos.
Resultados: Se incluyeron 221 deportistas del Centro de Alto Rendimiento de León. La mediana de edad fue de 17 años (IQR 15-20,5), siendo el 58% mujeres. De ellos un 36% practicaba deportes de alto componente dinámico y resistencia (atletismo de fondo, baloncesto, piragüismo, orientación, fútbol y ciclismo), mientras que el 64% restante entrenaba deportes de bajo/moderado componente dinámico (gimnasia rítmica, atletismo de velocidad y pruebas combinadas, golf y judo). Se observaron, en deportistas de alto componente dinámico con respecto a los de componente bajo/moderado, valores medios significativamente inferiores de frecuencia cardiaca (61,9 frente a 68,4 lpm; p = 0,0004) y superiores de PR (158 frente a 146 ms; p = 0,0007). De los parámetros ecocardiográficos analizados, resultaron significativamente superiores en los deportistas de resistencia respecto al resto, el grosor del septo (9,2 frente a 7,8 p < 0,0001), el grosor de la pared posterior (9,3 frente a 7,9; p < 0,0001), el diámetro diastólico del ventrículo izquierdo (VI) (45,7 frente a 43,9 mm; p = 0,0081) y la fracción de eyección del VI (70 frente a 67,3%; p = 0,0423). En los deportistas de resistencia, la prevalencia de criterio de hipertrofia de VI (HVI) por voltaje en el ECG fue elevada (25%), mientras que la frecuencia de criterio de hipertrofia por el índice de Romhilt-Estes fue muy inferior (3%). En ninguno de los casos se confirmó hipertrofia ventricular izquierda patológica en el ecocardiograma.
Conclusiones: El “corazón del deportista” es una adaptación cardiovascular fisiológica, característica de los deportistas de alto componente dinámico, que se caracteriza por FC basal menor y PR mayor en reposo en el ECG y mayores grosores, tamaños y función ventricular izquierda en el ecocardiograma, sin alcanzar valores patológicos.