Introducción y objetivos: Aunque el manejo de la cardiopatía isquémica ha cambiado sustancialmente en los últimos años, existe escasa información acerca de los cambios en el uso y resultados de las pruebas de diagnóstico por la imagen para detección de isquemia miocárdica. Nuestro objetivo fue evaluar los cambios en los resultados de la ecocardiografía de ejercicio y en el perfil de los pacientes referidos a esta técnica a lo largo del tiempo.
Métodos: Se evaluaron 12.339 pacientes sometidos a ecocardiografía de ejercicio en nuestro centro desde enero de 1997 hasta diciembre de 2012 y se estudiaron los cambios en las variables demográficas, los antecedentes cardiológicos, los síntomas y los resultados de los tests.
Resultados: Durante los periodos 1997-2000, 2001-2004, 2005-2008 y 2009-2012 se observó una progresiva disminución en la frecuencia de detección de isquemia miocárdica (35,3%, 32,2%, 29,2% y 25,4% respectivamente, p < 0,001) y en el porcentaje de ecocardiogramas de ejercicio anormales (52,2%, 43,3%, 37,9% y 34,2%, p < 0,001). Durante dichos periodos se observó asimismo una disminución tanto en el porcentaje de pacientes con antecedente de infarto de miocardio en los 30 días previos a la prueba (16,7%, 10,9%, 5,1% y 3,8%, p < 0,001) como en el porcentaje de aquellos con historia de infarto de mayor antigüedad (16,7%, 13,4%, 13,2% y 12,6%, p < 0,001). Aunque no se observaron diferencias significativas en el porcentaje global de pacientes con historia de revascularización coronaria, sí se observó una disminución progresiva en el porcentaje de pacientes con antecedentes de revascularización quirúrgica (15,1%, 10,8%, 8,8%, 7,4%, p < 0,001) y un incremento en el porcentaje de pacientes con historia de revascularización percutánea (8,7%, 12,9%, 13,2%, 16%, p < 0,001). También se observó una disminución en la frecuencia de pacientes con electrocardiogramas basales no interpretables (35,1%, 26,3%, 23,2% y 17,9%, p < 0,001) y un aumento del porcentaje de pacientes que recibieron tratamiento betabloqueante en las 48 horas previas a la prueba (4,9%, 5,9%, 9,4% y 16,2%, p < 0,001).
Conclusiones: Durante los últimos años, la frecuencia de isquemia inducible en la ecocardiografía de ejercicio ha disminuido progresivamente y esta tendencia es paralela a los cambios en el perfil de los pacientes referidos a ecocardiografía de ejercicio.