Introducción
Dra. Lina Badimón Maestro
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Índice de autores
Introducción y objetivos: Evaluar mediante indicadores asistenciales el manejo de los problemas clínicos que presentan los pacientes que sufren fibrilación auricular no valvular.
Métodos: Durante 5 meses se incluyeron consecutivamente a todos los pacientes atendidos en las consultas de cardiología de dos hospitales de tercer nivel por sufrir un episodio de fibrilación auricular o un proceso clínico debido a ella.
Resultados: Se incluyeron 533 pacientes (56,5% mujeres, edad media 70,5 ± 12,2 años), de los que el 24,3% eran menores de 65 años. La mayoría de los pacientes (53,8%) procedían de su médico de atención primaria o de otros servicios del hospital pero todos ellos habían sido derivados a cardiología por haber tenido síntomas derivados de su FA. Las mujeres tenían significativamente más problemas clínicos y un riesgo de embolia más elevado que los varones: CHA2DS2 (1,8 ± 1,2 frente a 1,5 ± 1,1, p = 0,001) y CHA2DS2-VASc (3,7 ± 1,4 frente a 2,2 ± 1,4; p = 0,0001). El 94% de los pacientes eran correctamente derivados a cardiología. Al 93,4% de ellos los cardiólogos de consultas les realizaron o indicaron una ecocardiografía. El índice de Rosendaal de los pacientes que venían realizando tratamiento con fármacos antivitamina K fue de 48,4 ± 37,4. Los cardiólogos indicaron tratamiento anticoagulante de acuerdo a su nivel de riesgo (fig.) a 425 pacientes (79,8%), 339 con fármacos antivitamina K y 84 con los anticoagulantes directos. Setenta y dos de los 108 pacientes (20,2%) que no recibieron tratamiento anticoagulante recibieron AAS mientras que solo 36 no recibieron ninguno.
Indicación de anticoagulación según niveles de riesgo.
Conclusiones: Uno de cada cuatro pacientes que consulta por problemas derivados de la fibrilación auricular son jóvenes, y son más las mujeres que los hombres. El control de la anticoagulación en los que usan fármacos antivitamina K es mejorable, por lo que el resultado de este estudio debe servir de acicate para impulsar herramientas de mejora. En práctica clínica existe une elevada adecuación a las recomendaciones de la guías europeas.