Introducción
Dra. Lina Badimón Maestro
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Índice de autores
Introducción y objetivos: Los pacientes con cardiopatías congénitas (CC) y arritmias auriculares (AA) a menudo carecen de factores tromboembólicos típicos, presentando otros factores de riesgo distintos que no se suelen asociar a la fibrilación auricular (FA). La necesidad de anticoagulación en las taquicardias por reentrada intra-auricular (TRIA) puede ser cuestionable, pero se ha reportado una prevalencia alta de trombos intracardiacos en estos pacientes. Hemos tratado de evaluar la práctica clínica actual en relación a la terapia de anticoagulación, y como se correlaciona con las recomendaciones de las guías clínicas existentes.
Métodos: Un total de 2.384 pacientes mayores de 14 años fueron incluidos prospectivamente en el registro regional RACCA. Se analizó el uso de la terapia anticoagulante o antiagregante en 258 pacientes con flutter auricular, FA o TRIA. Fueron considerados de alto riesgo tromboembólico aquellos pacientes con una reparación intracardiaca previa, cianosis, Fontan, válvulas mecánicas, ventrículo derecho subaórticoo un CHA2DS2-VASc > 1 punto.
Resultados: 158 pacientes (60,8%) estaban en tratamiento antitrombótico (warfarina 66,4%, nuevos anticoagulantes (NACO) 0,63% y antiagregante 29%). De los considerados de alto riesgo solo el 50% estaban anticoagulados. La cirugía de Fontan fue el procedimiento que de forma significativa recibía tratamiento antitrombótico (p 0,025) no encontrándose sin tratamiento ninguno de los Fontan con intención paliativa. A pesar de las recomendaciones de las guías, el 64% de los Fontan (11 pacientes) estaban anticoagulados, recibiendo antiagregación el resto. Pacientes sometidos a Senning, 6 estaban con warfarina y uno con NACO, sin que existan datos sobre farmacocinética ni farmacodinamia en CC. Pacientes cianóticos con síndrome de Eisenmenger o sometidos a Glenn, estaban antiagregados con mayor frecuencia (66%). Según la puntuación CHA2DS2-VASc, pacientes con CC simples, sin prótesis valvular o valvulopatía con compromiso hemodinámico, recibían anticoagulación en caso de ictus previo o ser hipertenso (92% p 0,011; 84% p 0,01, respectivamente). Hubo una tendencia a no anticoagular a mujeres ni a menores de 67 años (p 0,056).
Conclusiones: En nuestro registro, el manejo antitrombótico de pacientes con CC y AA, concordaba en un 50% con las directrices de las guías. En pacientes cianóticos hay que individualizar en función de riesgo trombótico y de sangrado.