Introducción
Dr. Arturo Evangelista Masip
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Índice de autores
Introducción y objetivos: La endocarditis infecciosa de cavidades derechas (EICD) se considera una enfermedad de buen pronóstico dentro de las infecciones cardiacas, clásicamente asociada a dispositivos intracavitarios o a adictos a drogas intravenosas. Sin embargo, su epidemiología y pronóstico podría estar cambiando a consecuencia de las variaciones sociosanitarias acaecidas en los últimos años en los países desarrollados, como está sucediendo en la endocarditis izquierda. Objetivos: evaluar los factores predisponentes y el pronóstico intrahospitalario de la EICD en los últimos 10 años.
Métodos: Se realizó un estudio retrospectivo observacional en 245 pacientes consecutivos diagnosticados de endocarditis infecciosa, en un centro de referencia para esta enfermedad, entre enero de 2008 y enero de 2018. Se recogieron parámetros clínicos, microbiológicos y ecocardiográficos. El objetivo primario se definió como la mortalidad intrahospitalaria o el requerimiento de cirugía cardiaca abierta durante la hospitalización.
Resultados:Presentaron una EICD 43 (17%) pacientes: 16 (37%) asociada a dispositivos cardiacos, 10 (23%) a drogadicción y 17 (40%) sin esas características (sin asociación). Los casos relacionados con dispositivos y sin asociación presentaron un aumento significativo de la incidencia, convirtiéndose el grupo sin asociación en el más prevalente en los últimos años (figura; p = 0,043). Además, la EICD sin asociación mostró un peor pronóstico clínico, tanto por lo que concierne al objetivo primario (4 frente a 35%; p = 0,006) como a la mortalidad intrahospitalaria (4 frente a 24%; p = 0,049). Aquellos pacientes que se sometieron a intervención quirúrgica (n = 2) demostraron una buena evolución posterior.
Evolución epidemiológica de las EICD en los últimos 10 años según el subgrupo al que pertenecen.
Conclusiones: La incidencia de la EICD sin asociación a dispositivos o drogadicción está aumentando y podría ser el subgrupo más prevalente en la actualidad. La mala evolución clínica de estos pacientes debería cambiar el concepto clásico de buen pronóstico de la EICD y plantear tratamientos alternativos o más agresivos para su tratamiento.