Introducción: La prueba de esfuerzo (PE) es el examen no invasivo de elección para el diagnóstico de enfermedad arterial coronaria (EAC). Su utilidad es inferior en pacientes con edad avanzada, condicionado por diversos factores externos. Nuestro objetivo es analizar las PE realizadas durante un periodo de 5 años en pacientes mayores de 70 años estudiados en nuestro centro así como su evolución posterior.
Métodos: De un total de 1.377 PE, 161 pacientes (11,6%) tenían una edad igual o superior a 70 años. 56 (34,8%) eran mujeres y el seguimiento medio fue de 25,9 ± 9 meses. La edad media era de 74,9 ± 3,1 (rango de 75-84) años. Se utilizó protocolo de Bruce en 85 (52,8%) pacientes. La PE se realizó fue mediante ergometría convencional en 117 pacientes, en 7 con consumo de oxígeno y en 37 con isótopos. El seguimiento se realizó mediante contacto telefónico o revisión de la historia clínica. Determinamos que una PE era positiva según las recomendaciones de la SEC. Consideramos una PE no concluyente cuando la FC máxima fue menor del 85%.
Resultados: De los 161 pacientes analizados, 65 (40%) tenían EAC pretest, 43 (26,7%) eran diabéticos, 105 (65%) hipertensos, 102 (63%) dislipémicos y 32 (19,9%) fumadores. La FC basal fue de 72,2 ± 13,2 lmp y la FC máxima 121,6 ± 20,3 lmp. El porcentaje de la FC máxima alcanzada fue de un 86,6 ± 12,5% y lograron 5,8 ± 2,1 METS de media. La PE fue positiva en 20 (12,4%) pacientes y negativa o no concluyente en 141 (87,6%). El seguimiento medio fue de 25,9 ± 9 meses. Los resultados de ambos grupos se resumen en la tabla.
Conclusiones: Los pacientes por encima de 70 años y con PE positiva, presentan buen pronóstico a los dos años de seguimiento, no existiendo diferencias significativas respecto a su mortalidad. Estos pacientes precisaron ingreso hospitalario, revascularización quirúrgica o percutánea más frecuentemente que aquellos con PE negativa o no concluyente.