Introducción: La implantación percutánea de válvula aórtica (IPVA) se ha establecido como una alternativa a la cirugía de sustitución valvular en pacientes de alto riesgo. Los datos de funcionamiento valvular a largo plazo de esta prótesis provienen principalmente de ensayos clínicos y registros de centros con gran experiencia. En este trabajo exponemos los resultados de nuestra cohorte de pacientes consecutivos provenientes de la práctica clínica diaria, con seguimiento = 2 años.
Métodos: De un total de 34 implantes (prótesis Edwards-Sapiens, Edwards LifeSciences) se seleccionaron aquellos con = 2 años de seguimiento (10 pacientes, todos ellos por vía transfemoral). Se exponen los datos clínicos y ecocardiográficos con una media de seguimiento clínico de 28 meses y ecocardiográfico de 27 meses.
Resultados: La edad media de los pacientes era 82,3 años con un Euroscore logístico medio del 28,6%. A los 24 meses, dos pacientes habían fallecido (una muerte intrahospitalaria al tercer día del procedimiento por taponamiento cardiaco y otro a los 54 días por sepsis). De los 8 restantes, solo uno tuvo un evento adverso (ingreso por insuficiencia cardiaca con FEVI conservada al mes 2, sin disfunción protésica). Los datos ecocardiográficos a los 2 años fueron (medias): área protésica 1,98 cm2; gradiente máximo 15,4 mmHg y medio 8,1 mmHg; FEVI 59,6%; masa ventricular 216,2 g (101 g/m2 indexada). Existía insuficiencia aórtica perivalvular ligera en 2 pacientes y moderada en otros 2. La insuficiencia mitral mejoró globalmente, de grado basal medio 1,8 a grado medio 1,2 a los 2 años.
Conclusiones: No hubo ningún caso de disfunción protésica durante el seguimiento. La supervivencia media a los 2 años fue del 80%. Los datos ecocardiográficos demuestran un excelente rendimiento de la prótesis percutánea a dos años.