Introducción: La Unidad del Dolor Torácico (UDT) surge como una necesidad asistencial, para dar cobertura al elevado número de consultas por dolor torácico de origen dudoso. Pretende evitar tanto el alta inapropiada como los ingresos innecesarios. Presentamos las características de los primeros 1.000 pacientes valorados.
Objetivos: Describir el seguimiento a un año, la prevalencia de factores de riesgo cardiovascular, así como las características clínicas de los primeros 1.000 pacientes valorados
Material y métodos: Revisamos de forma retrospectiva 1.000 pacientes que consultan en Urgencias por dolor torácico entre julio de 2006 y diciembre de 2007, derivados a nuestra unidad a criterio del médico de Urgencias. Se excluyen pacientes con movilización de enzimas cardíacas. Se recogieron variables clínicas, demográficas, ecocardiográficas y ergométricas. En función de ellas se estratificó a los pacientes en 5 grupos: alta por probabilidad baja de cardiopatía isquémica, alta para seguimiento en consultas convencionales, alta para prueba de detección de isquemia, ingreso para prueba de detección de isquemia e ingreso para cateterismo. Se realizó seguimiento a 1 año.
Resultados: La edad media fue de 53 años, con un 65,8% de varones. El tabaquismo fue el factor de riesgo cardiovascular más prevalente (55% eran fumadores en activo o exfumadores) seguido de la HTA (42,7%) y la dislipemia (37,2%). La diabetes mellitus estaba presente únicamente en el 14% de los pacientes. La valoración ergométrica resultó negativa en el 70,7% de los estudios, positiva en el 12,8% y dudosa o no concluyente en el resto. Junto con la valoración clínica se asignó cada paciente a uno de los 5 grupos de riesgo descritos, ingresando 19 pacientes para prueba de detección de isquemia y 83 para cateterismo. En el 92,4% de los cateterismos realizados se encontraron lesiones coronarias. En el seguimiento se recogieron 8 eventos cardíacos mayores
Conclusiones: Los resultados obtenidos en nuestros primeros años de funcionamiento son alentadores y coinciden con lo descrito en la literatura. Aunque sin poder cuantificar se evitaron numerosos ingresos innecesarios con un “escape” de isquémicos bajo (1%).