Objetivos: El tejido adiposo epicárdico (TAE) es un auténtico órgano endocrino que puede desempeñar un papel fundamental en el desarrollo de la enfermedad arterial coronaria, la hipertensión arterial, el síndrome metabólico y la fibrilación auricular (FA) postoperatoria. La adiponectina es una hormona antiinflamatoria y antiaterogénica producida principalmente por los adipocitos, e interleuquina-10 (IL-10) es una citoquina con efectos también predominantemente antiinflamatorios. Decidimos estudiar si los niveles en TAE de adiponectina y de IL-10 se relacionan con la FA.
Pacientes y métodos: Obtuvimos muestras de TAE, tejido adiposo subcutáneo (TAS) y plasma de 38 pacientes sometidos a cirugía cardiaca. Los niveles de adiponectina e IL-10 en las biopsias y en plasma se analizaron mediante PCR en tiempo real y ELISA, respectivamente.
Resultados: La edad media de los pacientes fue de 71,4 años (DE 10,2) y el 40% eran mujeres. 25 pacientes (66%) fueron sometidos a cirugía valvular y 13 a cirugía de revascularización. La prevalencia de FA –paroxística o permanente– era elevada (36,8%). Los pacientes con FA presentaban niveles más elevados de adiponectina en TAE (16,0 (2,9) vs 12,8 (3,4) u.a., p = 0,008) y en plasma (18,6 (10,0) vs 12,2 (7,0), p = 0,047). Sin embargo, tras ajustar por posibles factores de confusión, solo los niveles de adiponectina en TAE se asociaban a FA (p = 0,04). No encontramos diferencias en cuanto a los niveles de adiponectina en TAS ni en cuanto a los niveles de IL-10 en TAE, TAS y plasma entre los pacientes con FA respecto al grupo sin FA.
Conclusiones: Aunque la adiponectina producida por el TAE podría ser beneficiosa para el mantenimiento del ritmo sinusal, los pacientes con FA presentan niveles superiores de la hormona en este tejido. Este hallazgo paradójico sugiere que el papel de la adiponectina del TAE en la fisiopatología de la FA puede ser más complejo de lo que se postulaba inicialmente.