Introducción
Dra. Lina Badimón Maestro
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Índice de autores
Introducción y objetivos: La miocardiopatía hipertrófica (MCH) es una enfermedad de gran heterogeneidad en su presentación clínica y pronóstico. La resonancia magnética cardiaca (RMC) es actualmente el patrón oro para el diagnóstico y cuantificación de espesores miocárdicos en la MCH. En cambio la primera prueba de imagen diagnóstica suele ser el ecocardiograma transtorácico. Nuestro objetivo fue encontrar valorar la correlación cuantitativa existente entre las distintas técnicas de imagen en la MCH.
Métodos: Utilizando como fuente los ecocardiogramas transtorácicos realizados durante el periodo diciembre de 2011 a diciembre de 2012, seleccionamos todos los pacientes con MCH con estudio de RMC. De estos pacientes recogimos variables clínicas, antecedentes familiares de miocardiopatía, datos ecocardiográficos y electrocardiográficos. El protocolo de RMC incluía estudio de función sistólica con medición de la fracción de eyección mediante el método Simpson, cálculo de espesores y volúmenes y captación de gadolinio.
Resultados: Obtuvimos 61 pacientes con MCH en los que se había realizado RMC. La edad media era 66,2 ± 16 años, el 32,7% eran mujeres, el 41,7% tenía HTA y el 24,1% tenía historia familiar de MCH. La FEVI era 66, 8 ± 11%, el espesor parietal a nivel septal 15,6 ± 5,3 mm, en pared lateral 10,3 ± 3,9 mm y en ápex 14,1 ± 3,2 mm. El 54,5% de estos pacientes presentaban captación tardía de gadolinio. Al valorar la concordancia entre ambas técnicas de imagen para la estimación de espesor miocárdico, se obtuvo un coeficiente de correlación intraclase de 0,65 (IC95%: 0,41-0,80).
Conclusiones: En nuestro registro, se demostró un moderado grado de acuerdo entre el ecocardiograma transtorácico y la resonancia magnética cardiaca, en la cuantificación del espesor miocárdico en la miocardiopatía hipertrófica.