Objetivos: Analizar las características basales y trastornos de la conducción previos de los pacientes sometidos a IPVA en nuestro centro y detectar la incidencia de trastornos de la conducción secundarios y la necesidad de marcapasos a corto (30 días), medio plazo (6 meses) y el porcentaje de estimulación en el seguimiento.
Métodos: Análisis retrospectivo de 16 pacientes sometidos a IPVA entre junio 2011 y marzo 2013 con Corevalve en un Hospital de tercer nivel.
Resultados: Se siguieron a 16 pacientes de entre 53-88 años (media de 78 ± 9 años). 44% varones y 56% mujeres. 69% hipertensos, 44% dislipémicos, 50% diabéticos, 75% clase funcional III, 25% IV, 3 pacientes con marcapasos (MP) previo (19%). Previamente, el 7,7% presentaba PR largo, 31% BRIHH, 7,7% BRDHH. Al 56% se le implantó una CoreValve nº 26 y al 44% del 29, 100% de éxito. El 63% sufrieron bloqueo auriculoventricular (BAV) avanzado intraprocedimiento, desarrollando en el posintervencionismo un 19% de BAV 1º grado, 31% BAV avanzado, 50% BRIHH y 12,2% BRDHH. A los 30 días, se implantaron un 19% de MP y 20% (n = 10) a los 6 meses (porcentaje acumulado de 31%). Los pacientes que requirieron implante de MP tenían entre 77-89 años (media de 81 ± 5 años), 3 varones, 1 mujer. El 40% tenían BRIHH, 20% BRDHH. Todos sufrieron durante el intervencionismo BAV avanzado de la conducción. Se implantaron 4 MP VVD y 1 VDD y se objetivó en el seguimiento que 4/5 pacientes estaban MP dependiente.
Conclusiones: En nuestra experiencia inicial, los pacientes sometidos a IPVA son de edad avanzada, requiriendo un 31% de implante de MP. De los que se implantó MP, la media de edad era superior a la total, con más trastornos de la conducción previo. El BAV avanzado de la conducción intraprocedimiento fue más prevalente y quedando la mayoría marcapasos dependiente.