Introducción: La población de pacientes con edad superior a los 75 años tiene cada vez más presencia en las unidades de hemodinámica, optándose por estrategias más agresivas. En esta población, la seguridad de los stents farmacoactivos no se ha estudiado profundamente.
Objetivos: Determinar la seguridad de los stents recubiertos en pacientes ancianos.
Material y métodos: Se revisó nuestra base de datos de hemodinámica de nuestro centro para obtener los pacientes mayores de 75 años a los que se les implantó algún stent durante el año 2008 y la historia clínica informatizada. Hemos comparado la población de stent farmacoactivo (DES) con la de stent convencional (BMS) respecto a eventos como reingreso en cardiología, muerte cardiaca y por cualquier causa, reestenosis (RIS) o trombosis del stent documentada, hemorragia significativa y características basales.
Resultados: Se ha obtenido una muestra de 88 pacientes (34 DES, 54 BMS). La edad media de los pacientes con DES era 77,91 años, siendo la de los pacientes con BMS 79,8 años (p < 0,05). No se encontraron diferencias significativas en cuanto a la prevalencia de HTA, DM, dislipemia y cardiopatía isquémica previa. Los pacientes con BMS tenían más vasos enfermos (2,17 vs 1,87, diferencia no significativa), alcanzándose la revascularización completa en porcentajes similares (BMS 81 %, DES 88 %). No se encontraron diferencias significativas en las tasas de reingreso (BMS 35 %, DES 26 %), hemorragia significativa (BMS 3,7 %, DES 2,9 %), trombosis del stent (BMS 1,8 %, DES 2,9 %) y RIS (BMS 5 %, DES 8 %). Hemos encontrado diferencias significativas en la mortalidad por todas las causas (BMS 24 %, DES 3 %, p < 0,01) y por causa cardiaca (BMS 16,6 %, DES 3 %, p < 0,05).
Conclusiones: Los stents farmacoactivos son, al menos, tan seguros como los convencionales en la población mayor de 75 años y deberían utilizarse de la misma manera que en pacientes de menor edad.