Introducción
Dr. Luis Rodríguez Padial
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Índice de autores
Introducción y objetivos: El implante de DAI ha de ser considerado en los pacientes con FEVI ≤ 35% pese a tratamiento médico (TM) óptimo. Los programas de rehabilitación cardiaca (PRCs) permiten una correcta estratificación y selección de pacientes con disfunción sistólica ventricular izquierda (DSVI) candidatos a DAI. El objetivo de nuestro estudio fue analizar la población con FEVI ≤ 35% en nuestro PRC e identificar los predictores de implante de DAI.
Métodos: Estudio observacional retrospectivo en el que se incluyeron los pacientes con DSVI participantes en un PRC entre 2006 y 2015. Se proporcionó durante 8-10 semanas un PRC consistente en entrenamiento físico y TM óptimo. Se determinó la FEVI antes y después del PRC. La CF se evaluó mediante la clasificación NYHA y la realización de un test de esfuerzo (TE) antes y después. La capacidad de ejercicio (CE) se evaluó en METs.
Resultados: Se incluyeron 206 pacientes, edad media 57,6 ± 12,3 años, 89,8% varones. Las características basales se muestran en la figura. Tras el PRC, se realizó implante de DAI en 35 pacientes (17%). Respecto al TM, el uso de β-bloqueantes, IECAs/ARA-II, antialdosterónicos e ivabradina fue superior tras el PRC (p < 0,01). No se identificaron diferencias según el sexo, edad, perfil de riesgo cardiovascular y comorbilidades entre los pacientes que precisaron o no implante de DAI. El uso de diuréticos fue superior en el grupo de pacientes al que se implantó DAI antes (p = 0,002) y después del PRC (p = 0,047). La clase NYHA antes del PRC fue I 44,7%, II 48%, III 6,7%, IV 0,6%; mejorando la misma tras el PRC: I 73,2%, II 25,6%, III 1,2% (p < 0,001). Respecto al TE, la media de METs mejoró tras el PRC. Los pacientes a los que se implantó DAI tenían peor clase NYHA, menor FEVI y menor METs antes y después del PRC (tabla). Se encontraron diferencias en el número de pacientes con FEVI ≤ 35% y clase NYHA II-III al inicio y fin del PRC (55,3 frente a 14,5%; p < 0,001), lo que modifica la indicación de implante de DAI durante el PRC.
Características basales.
Resultados de FEVI, capacidad funcional y ejercicio |
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Antes No DAI |
AntesDAI |
p |
Después No DAI |
Después DAI |
p |
Clase NYHA |
I: 52%, II: 44%, III: 3,2% |
I: 20%, II: 60,8%, III: 12% |
0,005 |
I: 80,3%, II: 19,7% |
I: 51,7%, II: 44,8%, III: 3,4% |
0,002 |
FEVI |
30,48 ± 4,55 |
27,6 ± 6,77 |
0,022 |
44,8 ± 8,67 |
30,75 ± 7,75 |
< 0,001 |
METs |
6,55 ± 2,63 |
5,22 ± 2,76 |
0,012 |
9,99 ± 2,70 |
8,64 ± 2,88 |
0,022 |
Diferencias de FEVI, capacidad funcional y ejercicio entre grupo de implante y no implante de DAI antes y después del programa. |
Conclusiones: Los PRCs permiten una adecuada selección de pacientes subsidiarios de implante de DAI. No se identifican diferencias en cuanto al perfil de riesgo cardiovascular y las comorbilidades entre los pacientes subsidiarios o no de implante de DAI. Sin embargo, dichos pacientes presentan menor FEVI, peor CF y CE al inicio del PRC, objetivando una menor mejoría durante el PRC. La proporción de pacientes con indicación de implante de DAI disminuye significativamente tras el PRC.