Introducción: La enfermedad cardiovascular (ECV) es la causa de muerte más frecuente tanto en hombres como en mujeres. Las mujeres presentan factores de riesgo cardiovascular similares a los hombres, aunque la influencia de los estrógenos podría estar en relación con una presentación más atípica. Asimismo se conoce que la menor capacidad física de las mujeres puede influir en el resultado de la prueba de esfuerzo (PE). Nuestro objetivo pretende analizar los factores de riesgo cardiovascular en las mujeres con enfermedad coronaria conocida que acuden a la PE en comparación con los hombres y su influencia en la misma.
Métodos: Analizamos las características clínicas y el comportamiento de 101 mujeres y 462 varones con enfermedad coronaria conocida durante la PE. Las PE fueron realizadas según protocolo de Bruce en cinta realizadas en los últimos 5 años, y que tenían un seguimiento medio de 21,6 ± 11 meses. Determinamos que una PE era positiva según las recomendaciones de la SEC. Consideramos una PE no concluyente cuando la FC máxima fue menor del 85%. Todos los pacientes fueron seguidos para conocer su evolución tras la PE mediante teléfono o revisión de la historia clínica.
Resultados: De los pacientes analizados se observaron mayor número de PE no concluyentes en mujeres en comparación con los hombres (55,9% vs 38,9% respectivamente), no apreciándose grandes diferencias entre las positivas y las negativas. En cuanto a la edad no se encontraron diferencias significativas (60 ± 10,2 años en varones y 59 ± 16,5 en mujeres), así como tampoco en los factores de riesgo cardiovascular entre ambos grupos, a excepción de la diabetes mellitus, significativamente mayor en las mujeres respecto a los hombres 46% vs 28%; p < 0,001). En cuanto a la capacidad funcional expresada en METs fue mayor en los varones (8,22 ± 2,6 vs 6,18 ± 2,6; p < 0,001) en mujeres, sin embargo la supervivencia o cateterismos tras la PE fueron similares entre ambos grupos.
Conclusiones: Nuestros resultados representan una población local en la que destaca que las mujeres con enfermedad coronaria conocida tienen la misma edad que los varones, a diferencia de lo publicado en la literatura, y que el gran porcentaje de mujeres diabéticas suponen un potente factor de riesgo cardiovascular que pudiera relacionarse con una peor capacidad funcional y un mayor porcentaje de pruebas no concluyentes.