Antecedentes y objetivos: La comorbilidad y la edad avanzada son frecuentes en el SCA y ambos suelen ser criterios de exclusión para ingresar en Unidades Coronarias (UC). Este estudio pretende valorar si la comorbilidad, medida mediante el índice de Charlson (iCh), y ajustado por edad (iCha), se asocia con la duración de la estancia, su pronóstico y el uso de tratamientos agresivos en una UC.
Métodos: Estudio prospectivo de 212 pacientes consecutivos (agosto 2008-marzo 2009) ingresados por SCA en una UC de un hospital terciario universitario. Se calculó el iCh e ICha, y se estudió su asociación con la duración de la estancia, con la variable combinada estancia prolongada o mortalidad y con la necesidad de al menos una medida terapéutica agresiva.
Resultados: No hubo diferencias en el ICh ni en el ICha entre los grupos de estancia corta y prolongada. Tampoco hubo diferencias en estos índices entre los grupos de acuerdo a la variable combinada estancia prolongada y mortalidad. Sin embargo, los pacientes que requirieron el uso de medidas terapéuticas agresivas tenían valores de iCh e ICha mayores que los pacientes sin necesidad de estas medidas (diferencia media = 1,6 IC95 %: 0,7-2,4 para ICh y 2,1 IC95 %: 1,1-3,0 para ICha).
Conclusiones: Dado que el iCh e iCha no están asociados a la duración de la estancia ni a la mortalidad, una comorbilidad elevada no debería excluir “per se” el ingreso en una UC, aunque esta puede condicionar la necesidad de tratamiento agresivo.