Introducción
Dr. Luis Rodríguez Padial
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Índice de autores
Introducción y objetivos: El ejercicio físico está recomendado como una medida de prevención cardiovascular aunque en determinadas condiciones puede desencadenar un síndrome coronario agudo (SCA). Nuestro objetivo fue analizar el perfil clínico y pronóstico de los SCA relacionados con el deporte (SCA-RD).
Métodos: Estudio prospectivo y observacional de todos los pacientes ingresados en un centro entre agosto 2015 y noviembre de 2016. A todos se les interrogó sobre el contexto en que se inició el SCA y se consideraron SCA-RD aquellos en los que los síntomas se iniciaron durante la práctica de ejercicio físico y en la primera hora tras el mismo.
Resultados: Incluimos 345 pacientes, 17 (4,5%) fueron SCA-RD y estos presentaron menor edad media (48,8 ± 10,2 frente a 69,0 ± 12,8; p < 0,01), fueron todos varones (100 frente a 75,3%; p < 0,01) y presentaron menor prevalencia de todos los factores de riesgo cardiovascular, salvo el tabaquismo que fue similar (41,2 frente a 29,9%; p = 0,32). Los pacientes con SCA-RD presentaban más frecuentemente antecedentes familiares de cardiopatía isquémica precoz (17,6 frente a 4,6%; p = 0,02) y valores más elevados de LDLc (116,0 ± 34,4 frente a 97,1 ± 38,5; p = 0,04) y hemoglobina (15,2 ± 1,0 frente a 13,2 ± 2,0; p < 0,01). Respecto a la presentación del SCA, el porcentaje de SCACEST fue similar (47,1 frente a 40,2%; p = 0,58) SCA-RD respecto al resto, aunque los primeros presentaron un valor menor en la escala GRACE (111,3 ± 42,7 frente a 157,1 ± 46,0; p < 0,01) y una prevalencia similar de parada cardiaca extra-hospitalaria (5,9 frente a 3,4%; p = 0,58). La mortalidad hospitalaria global fue 7,8% fue similar en los pacientes con SCA-RD y el resto (5,9 frente a 7,9%; p = 0,76) pero sí se observaron diferencias si se excluyeron los casos de parada cardiaca extrahospitalaria (0 frente a 6,0%; p = 0,01). No se observaron diferencias en la tasas de revascularización entre los pacientes con SCA-RD y el resto, al igual que en los tratamientos recomendados al alta. En los primeros 6 meses tras el alta hospitalaria (mediana de seguimiento 7 meses, rango intercuartílico 4,0-10,0), no falleció ningún paciente de los SCA-RD.
Conclusiones: El porcentaje de pacientes con SCA-RD es muy bajo (< 5%) y son fundamentalmente varones fumadores con valores más elevados de LDLc y antecedentes familiares de cardiopatía isquémica precoz. El pronóstico de los pacientes con SCA-RD es muy bueno, salvo que presenten una parada cardiaca extrahospitalaria.