Introducción: La oclusión crónica total (OCT) es una de las últimas fronteras del intervencionismo coronario. Los resultados clínicos a largo plazo difieren de forma considerable entre diferentes estudios.
Métodos: Se realizó un análisis de 292 OCT verdaderas en un total de 284 pacientes, realizadas entre los años 2002 y 2012. Se analizó la revascularización de la lesión (RLD) y del vaso (RVD) diana, la reestenosis binaria inducida por isquemia, la trombosis según criterios ARC y el MACE (revascularización de la lesión o el vaso diana, infarto de miocardio o muerte cardiovascular) entre los grupos revascularizados de forma exitosa (GE-OCT) y el grupo de fracaso (GF-OCT) en la revascularización. Los datos fueron analizados mediante el paquete estadístico SPSS 15.0.
Resultados: Mediana de edad de 62,7 años. Tasa global de éxito en la desoclusión del 76%. Mediana de seguimiento de 36,8 meses (RIQ 14,7-56,2). Tasa de seguimiento del 99,6%. No se realizó seguimiento angiográfico sistemático. La mortalidad intrahospitalaria fue del 0,70%. Tasa global de supervivencia del 93,2% en el GE-OCT y del 84,3% en el GF-OCT (p = ns). En el GE-OCT la tasa de RLD, RVD y reestenosis binaria fue de 8,7%, 9,6% y 9,7% respectivamente. Tasa de trombosis definitiva del stent según los criterios ARC del 1,4%. MACE total del 14,2% en GE-OCT vs 26,1% en GF-OCT (p = 0,022) y mortalidad cardíaca del 2,7% (6 casos) en GE-OCT vs 11,4% (8 casos) en el GF-OCT (p = 0,007).
Conclusiones: El tratamiento percutáneo de la OCT es seguro, con baja incidencia de eventos en el seguimiento clínico y tasas de revascularización aceptables. Objetivamos una menor tasa de mortalidad cardíaca y eventos cardiovasculares adversos en el grupo de pacientes revascularizados con éxito de una oclusión crónica total.