Antecedentes y objetivos: La indicación de la terapia anticoagulante oral (TAO) en la fibrilación auricular no valvular se basa en la estratificación del riesgo embólico. En la práctica clínica diaria, la escala CHADS2 es la más utilizada, aunque se ha propuesto una versión revisada CHA2DS2VASc. Apenas se ha estudiado su valor pronóstico en los pacientes, una vez iniciada la TAO, pero estas escalas al basarse en la presencia de edad avanzada, factores de riesgo cardiovascular, insuficiencia cardiaca y enfermedad vascular, podrían tener un valor pronóstico añadido.
Métodos: Se estudiaron 827 pacientes consecutivos (mediana edad 76 años, 50 % mujeres) con fibrilación auricular permanente no valvular, con TAO estable (INR en rango los 6 meses previos). Se calculó la escala de riesgo CHADS2 y CHA2DS2VASc en el momento de la inclusión en el estudio. Se realizó un seguimiento clínico, con revisión exhaustiva de las historias clínicas y llamada telefónica durante 24 meses, recogiendo la muerte cardiovascular, eventos trombóticos, embólicos y hemorrágicos.
Resultados: Ambas escalas estratificaron adecuadamente el riesgo trombótico de los pacientes. Según la escala CHADS2 en bajo 0,54 %-año, moderado 3,35 %-año y alto 6,60 %-año, con un estadístico C de 0,61 (0,55-0,67), p: 0,001). Según la escala CHA2DS2VASc bajo 1,13 %-año, moderado 2,60 %-año y alto 5,45 %-año, con un estadístico C de 0,60 (0,51-0,63), p: 0,038. La tasa de episodio embólico es baja, 1 % y año. Sin embargo, la mayoría de los fenómenos cardiovasculares son secundarios a cardiopatía isquémica.
Conclusiones: Las escalas de estratificación CHADS2 y CHA2DS2VASc, utilizadas para estratificar el riesgo embólico, son también útiles para estratificar el riesgo cardiovascular bajo la TAO estable. Debido a su facilidad de cálculo y su reconocimiento en la práctica clínica diaria, se recomienda su uso más allá de la valoración del inicio de la TAO.