Introducción
Dr. Juan José Gómez Doblas
Presidente del Comité Científico del Congreso
Vicepresidente de la SEC
Comités ejecutivo, organizador y científico
Comité de evaluadores
Listado de sesiones
Índice de autores
Introducción y objetivos: La amiloidosis cardiaca (AC) es una miocardiopatía infiltrativa por depósito amiloide en la que las formas AL y ATTR constituyen más del 98% de los casos. El infradiagnóstico, junto con el desarrollo de nuevas terapias, han otorgado un papel fundamental a la identificación de red flags (RF) con el objetivo de alcanzar un diagnóstico precoz. Pese a que las RF son conocidas en ambos grupos, conocemos poco acerca de la evolución natural de las mismas y su orden de aparición. Objetivos: analizar y comparar las RF y tiempos y retrasos diagnósticos entre la forma AL y ATTR en una cohorte de pacientes con AC.
Métodos: Estudio unicéntrico, observacional y retrospectivo en una cohorte de 60 pacientes (edad media 80,4 ± 7,8 años) con diagnóstico definitivo de AC según los criterios vigentes. Se realizó búsqueda en historia clínica y recogida de variables revisando la aparición de RF, tiempos y eventos durante el seguimiento. Mediana de seguimiento 19 meses (rango intercuartílico 8-30).
Resultados: Se incluyen 60 pacientes (80% varones). El 86,7% fueron ATTR y el 13,3% AL. El 88% de los pacientes eran hipertensos, 38% diabéticos, 75% fibrilación auricular y 45% insuficiencia renal. Al comparar ambos tipos de AC, se observó una media de 8,2 ± 2,3 RF en ATTR frente a 8,4 ± 2,3 en AL. El número de RF prediagnóstico fue 6,8 en ATTR frente a 6 en AL y la media de contactos médicos hasta diagnóstico y de meses desde el inicio de síntomas hasta diagnóstico fue de 12,3 frente a 17,1 y de 82,4 frente a 72 en la forma ATTR frente a AL, respectivamente. Tras el diagnóstico, los ATTR ingresaban de media 1,6 ± 1,5 veces frente a 2,4 ± 2,2 de los AL. Ninguna de estas diferencias resultó estadísticamente significativa. En cuanto a las RF, en ambas formas las más frecuentes fueron las de imagen (hipertrofia ventricular y dilatación auricular), en más del 90% de los casos, seguidas de otras como desarrollo de insuficiencia cardiaca, elevación de biomarcadores, tegumentarias o electrocardiográficas. En ambas formas la mortalidad superó el 50%, alcanzando el 67% en ATTR.
Conclusiones: Tanto la forma AL como ATTR de AC se caracterizan por la abundancia de RF (más de 8 de media). Los tiempos de retraso diagnóstico y los tipos de RF presentes en ambas formas fueron similares, aunque con mayor número de RF, de contactos médicos y de ingresos posdiagnóstico en la forma AL, en probable relación a un peor pronóstico de este tipo de AC.