Antecedentes: El manejo de pacientes con dolor torácico de origen incierto y sin cardiopatía previa representa un reto diagnóstico en la práctica clínica.
Métodos: Se estudiaron 103 pacientes consecutivos sin cardiopatía conocida, que consultaron en urgencias por dolor torácico de posible origen coronario, sin alteraciones en el electrocardiograma ni elevación de marcadores convencionales de necrosis a su llegada (troponina T negativa) (60 ± 12 años, 64 % varones). Las muestras de sangre recogidas a su llegada a urgencias fueron almacenadas para su ulterior análisis. A todos los pacientes se les realizó un test de isquemia y/o coronariografía. El evento de estudio se definió como el diagnóstico final de enfermedad coronaria (IAM, test de isquemia positivo y/o revascularización) tras un año de seguimiento. La concentración de troponina T de alta sensibilidad (hs-TnT) (mediana [cuartiles]) fue medida a posteriori en las mismas muestras recogidas a la llegada a urgencias.
Resultados: Un total de 21 pacientes (20 %) presentaron el diagnóstico final de enfermedad coronaria, los cuales presentaron a su llegada niveles de hs-TnT más elevados: 0,017 [0,010-0,042] vs 0,005 [0,003-0,009] ng/ml (p < 0,001). El análisis ROC mostró un área bajo la curva de 0,80 (IC95 % 0,71-0,87), siendo el punto óptimo de corte > 0,009 ng/ml: sensibilidad 81 %, especificidad 80 %, valor predictivo positivo 52 % y negativo 94 %. Tras el ajuste multivariado por otras variables asociadas con el diagnóstico final de enfermedad coronaria (escala clínica de Geleinjse, diabetes, hipertensión, creatinina), sólo la hsTnT > 0,009 ng/ml (p < 0,001, OR 14, IC95 % 4-53) y la escala clínica de Geleinjse (p = 0,006, OR 1,4, IC95 % 1,1-1,8) fueron predictores independientes.
Conclusiones: La troponina T de alta sensibilidad mostró ser una herramienta útil en el manejo diagnóstico de pacientes que consultan por dolor torácico de etiología incierta y TnT convencional inicial negativa.