Introducción
Dr. Luis Rodríguez Padial
Presidente del Comité Científico del Congreso
Comité ejecutivo
Comité de evaluadores
Índice de autores
Introducción y objetivos: El recambio valvular aórtico percutáneo (TAVI) con la primera generación de prótesis autoexpandibles, ha demostrado ser al menos igual de efectivo que el recambio quirúrgico convencional en pacientes de riesgo quirúrgico elevado o intermedio. La segunda generación de estos dispositivos ha permitido reducir el calibre del introductor y mejorar la liberación de la prótesis. Nuestro objetivo fue comparar los resultados del procedimiento dependiendo de la generación de prótesis autoexpandible utilizada.
Métodos: Registro de pacientes tratados mediante el implante de un prótesis aórtica percutánea, entre enero de 2010 y junio de 2016. Se han analizado 2 cohortes de pacientes según el modelo utilizado, comparando la incidencia de complicaciones y mortalidad durante el ingreso.
Resultados: Un total de 104 pacientes fueron incluidos, de los que 59 fueron tratados con la primera generación y 45 con la segunda. No hubo diferencias significativas en la edad o sexo de los pacientes, aunque el riesgo de los pacientes tratados con la primera generación fue ligeramente más alto que con la segunda (puntuación STS 6,5 frente a 4,8, p = 0,031). En cuanto a los resultados, el uso de la segunda generación de prótesis se asoció a una reducción significativa de las complicaciones vasculares mayores (13,6 frente a 2,3%, p = 0,02) y de la necesidad de marcapasos definitivo (24,6 frente a 13, 4%, p = 0,01). La incidencia de ictus discapacitante (1,7 frente a 0%, p = 0,38) y mortalidad a los 30 días (3,4 frente a 2,2%, p = 0,72) fue muy baja y sin diferencias entre los grupos.
Conclusiones: El uso de prótesis aórticas percutáneas de segunda generación se asocia a una reducción significativa de las complicaciones vasculares mayores y necesidad de marcapasos definitivo.